Estos Cake Pops especiales son para una persona especial en un día también especial: el cumpleaños de mi «cuñà» ESTHER, una mujer alegre y detallista que desde el principio, y aún todavía, me anima en esta locura de proyecto.
Otro reto más, una gran prueba, un divertido experimento, en definitiva un riesgo muy apetecible: ¿superarían “mis chicos” el transitado trayecto Alicante – Madrid? Porque no hay distancias si se quiere, sólo excusas.
Había que protegerles individualmente (aquí no bastaba con la bolsita de celofán), cada uno llevaría su correspondiente etiqueta, y posteriormente habría que cobijarles a todos en una caja conjunta preferiblemente alta (según la longitud de los palitos) y evitando al máximo las esquinas. Aproveché para enviar un mensaje nada “subliminal” en la trasera de la tapa …
Ah, y por supuesto no podía olvidarme de un importante detalle: mi pequeña aportación para la ampliación de una magnifica colección de broches de la protagonista del día con uno muy especial.
Deseo que no hayan sufrido mucho tras más de 400 Km. de obstáculos, y espero impaciente alguna foto tras su llegada, sobretodo la del cake pop principal con la vela encendida (que previamente había sido testada).
Feliz día!! y que cumplas muchos más así de bien, «taitantos» besos
Maripi!! Te deseo que sigas con el proyecto adelante.^^ Me parece una cucada las cajitas, tengo ganas de ir a tu casa a que me enseñes a hacer unos pocos cake pops.:P Un besote muy grande!!
Espero poder verte el mes que viene 😉
Precioso detalle <3
Y siempre adelante!!!!
Un abrazo
^_^ Sonia
¡Gracias artista! el que la sigue la consigue, no?