Anatomía de un Cake Pop

Estas semanas he estado de médicos, y he reflexionado mucho sobre lo verdadera que es la simbiosis “cuerpo & alma”, conexión de sentidos y pensamiento, que a veces desafortunadamente no van todos a una.

Por ello me he parado a analizar en profundidad una de mis bizcobolas, extrayendo toda su esencia, para llegar a obtener finalmente 3 partes iguales en proporción:

• 33,33% RICOS porque están hechos con ingredientes naturales, luego están buenos y por tanto son saludables
• 33,33% ORIGINALES porque son bonitos y llamativos
• 33,33% ENCANTADORES porque te los presento para conquistar tu corazón desde el primer momento. En definitiva, han conseguido tener un estilo propio

De nuevo fusión de sentidos y sensaciones. Eso es lo que los hace ÚNICOS, porque están elaborados con mucha paciencia y bien cargaditos de energía positiva. Que no te vendan la moto que es más rápido con una máquina barata, porque luego no se aguantarán de pie… ¡sólo es cuestión de cogerle el tranquillo!

A mi me han enseñado, y procuro hacérselo entender también a mi pequeño retoño, que todos podemos hacer todo aquello que nos propongamos, pero bien es cierto que todos no lo hacemos igual. De ahí lo de  “especializarse” para intentar destacar (aunque sólo sea un poquito) de tu vecina y a veces felina competencia ¡Y qué estupendo es poder creer conseguirlo cuando es algo que te gusta de verdad!

Me sienta tan bien hacerlos, disfruto muchísimo poniéndoles guapos y cómo me anima el comerlos. Son mi principal medicina, y deseo que también la tuya.

«Los Cake Pops de Maripi te harán sentir mejor: los identificarás fácilmente y con ellos te recobrarás más rápido»